LA CUBETA PALOMERA

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El cine es sencillo de entender cuando se visualiza tan solo como negocio. Como parte de la industrial del

entretenimiento, es una dosis de ficción para distraer al publico de sus penas cotidianas. Fácil de entender.

Cuando se entiende como arte se empieza a complicar la cosa ya que un cineasta requiere de una gama de recursos técnicos y humanos a su disposición para poder expresar su arte a comparación de un pintor que tan solo requiere de algunas herramientas especializadas y un lienzo para poder llevar a cabo su arte.

Pero la cosa se pone aun mas difícil cuando se debe de entender como ambas cosas en una dualidad muchas veces irreconciliable.

Me he topado con mucha gente que paga un boleto para ver una película con el único propósito de entretenerse un rato y distraerse de los problemas cotidianos. Supongo que es una postura valida hasta cierto punto, ya que el cine sin lugar a dudas es una industria cuyo propósito primordial es entretener. Sin embargo estoy convencido que dentro de las múltiples facetas de esta compleja industria existe una a la que yo en lo personal le doy mucho valor y es que hasta la película mas chafa puede ayudarte a pensar y a reflexionar sobre temas o situaciones que a veces en la vida real no se nos presentan nunca y por ende  nunca pensamos en ellos. Para mi el cine siempre ha sido una especie de gimnasio de emociones. Un lugar a donde voy a sentir y a pensar sobre situaciones que difícilmente voy a a enfrentar en mi vida cotidiana. Así como para muchos el cine les permite alejarse de la realidad, a mi me permite acercarme y adentrarme en temas reales y relevantes que son parte esencial de la realidad.

Aun cuando los personajes son fantásticos y espectaculares  las historias suelen tener un factor muy humano que los escritores no pueden suprimir,  y que de hecho no existe razón para que intentarán suprimirlo.

Desde La Marca del Zorro de 1920 con Douglas Fairbanks hasta Avengers del 2012 hemos visto cientos de héroes ejecutar las mas espectaculares proezas en su lucha contra el mal, o con el fin de salvar a la humanidad de algún villano o catástrofe natural que ponen en riesgo su bienestar.  Supongo que es valido entrar a la sala de cine nada mas para ver al Zorro saltar por las azoteas del antiguo pueblo de Los Angeles, esgrimir contra los soldados y desaparecer por el horizonte cabalgando sobre Tornado a toda velocidad.

Sin embargo a mi me gusta preguntarme que fue lo que motivó a Don Diego de la Vega ha arriesgar el pellejo por los pobladores de Los Angeles cuando el tenía su vida resuelta. Como logra ganarse la lealtad de personajes como Bernardo su fiel ayudante mudo. 

En Avengers uno puede sentarse a disfrutar de las escenas de acción, como ver a Scarlett Johanson y su abrumadora personalidad derrotar  a tres maleantes del doble de su tamaño a mano limpia, y ya.

A mi me gusta a parte de eso, adentrarme en el conflicto de lo que significa juntar en un equipo a egos y personalidades del tamaño de la de Tony Stark, junto con un dios nórdico y un genio científico.

Un buen ejemplo de como una película puede tener temas muy interesantes subyacentes a la acción y los efectos especiales es StarShip Troopers de Paul Verhoeven de 1997.

Si uno es capaz de traspasar la barrera de lo superficial impuesta entre otras cosas por la belleza de los protagonistas ( Casper Van Dien, Dina Meyer, Denise Richards) uno puede observar un planteamiento interesante sobre una posible sociedad del futuro completamente militarizada en un mundo totalmente globalizado donde da lo mismo vivir en Nueva York que en Buenos Aires.

Una sociedad donde ya no hay discriminación ni por raza ni por genero. Hombre y mujeres viven en equidad. Hasta se bañan juntos sin ningún problema.(gran escena, por cierto.)

Así pues el cine me ha permitido ir a mundos distantes totalmente alejados de mi realidad pero también me ha permitido adentrarme en lo mas profundo de la psique humana y me ha permitido ver a mis propios conflictos y emociones personales directamente a los ojos.

Por eso acompañado de LA CUBETA DE PALOMITAS haré mi humilde homenaje a los hombres y mujeres de cine que me han divertido y distraído de mis penas así como aquellos que me han permitido sentir las emociones mas profundas y reflexionar sobre temas de absoluta relevancia.

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