martes, 20 de noviembre de 2012

35 Aniversario de La Guerra de las Galaxias

Los que nacimos bajo el signo de Star Wars en 1977 pues que íbamos a andar viendo esta muvi en el cine si estábamos recién paridos.
Lo malo en mi caso es que ni siquiera me tocó ver "El Imperio Contraataca" cuando fue estrenada, fue hasta 1983 en la ciudad de Guadalajara durante las vacaciones de verano cuando vi "El Regreso del Jedi" en el cine.
De hecho antes por ahi de 1982 gracias a mis primos y su reluciente videograbadora Betamax fue que tuve la oportunidad de ver "La guerra de las Galaxias". Recuerdo que fue todo un evento en casa de mis primos pues todos afirmaban que me iba a encantar y querían ver mi reacción. Y no estaban equivocados, vaya que reaccioné.

Star wars en formato Beta de 1982.
A los cinco años esa película para mi fue totalmente real, creíble y posible.Cada uno de los efectos especiales me engañó completamente. Yo juraba que las naves eran verdaderos vehículos que funcionaban y volaban. El deslizador de Luke por supuesto que era capaz de flotar en el aire. Las tropas de asalto eran verdaderos soldados. 3po y R2 por supuesto que eran robots auténticos, ¿como no lo iban a ser?
De hecho el que mas trabajo me costó agarrarle la onda fue al buen Chewbacca. Sabía que tenia que ser un actor disfrazado pero es que era tan real que realmente no sabía como explicármelo.
Los moradores de las arenas y los Jawas realmente me daban miedo, de hecho las escenas donde salen estos personajes hacían que la película me pareciera mas seria de lo que era, me parecía como una película para gente grande.
Lo mismo me sucedía con los diálogos. Eran conversaciones de adultos tratando temas serios e importantes.
Los comandantes imperiales hablando del peligro que representaba la rebelión y la confianza que algunos tenían en el poder destructivo de la Estrella de la Muerte.
La escena de Leia enfrentando al Gobernador Tarkin como me daba coraje. Como ella le hablaba con desprecio y a el le valía y luego para colmo la engaña y le destruye su planeta. Nombre, estaba yo que echaba lumbre, esas cosas son serias y no se juega con ellas.
Y que puedo decir de la escena del compactador de basura, era sencillamente angustiante.
Finalmente la batalla de Yavin para mi fue como ver realmente un documental de guerra, todo era absolutamente real.
Fue en aquel momento en la recamara de mis tios, que era donde se encontraba la tele con la video, en tiempos cuando era un verdadero lujo contar con videocassettera, cuando me expuso mi familia al efecto Star Wars.
Lo que es cierto es que a lo mejor la película por si sola no me hubiera generado el efecto fan, sin embargo ese fn de año, mi tía, mando pedir dos de las naves al gabacho, la X-wing y el AT-ST y me las regaló de navidad, junto con la figura de Luke de Hoth. Mi primo ya me había regalado una de sus figuras de acción, un snowtrooper. Fue con estos juguetes que entonces ahora si ya estaba yo equipado para caminar el camino del fan.
Mis primeras naves,
Lo que sucede es que creo que mi papá y mi tía reconocieron que Star wars se trataba de un trabajo creativo sin precedentes con el que valía la pena que yo tuviera contacto, y esto lo comento porque sin que yo lo pidiera ellos me empezaron a regalar cosas.
Mi papá ya ha confesado que las naves le encantaron y que los juguetes le parecían reproducciones muy detalladas y bien hechas de las mismas y que por eso le gustaba regalármelas. 
Lo malo estuvo en que el AT-ST traía un pequeño catalogo con el resto de la colección y las imágenes ahí contenidas desataron en mi el frenesí coleccionador.

El catalogo que me volvió fan.
Como yo no había visto el Imperio para mi todo el contenido de este pequeño catalogo me era totalmente desconocido y cautivador. La Slave 1 y sobretodo el AT-AT se convirtieron en verdaderas obsesiones, santos griales que debía conseguir. Desafortunadamente para mi nunca fue posible durante mi infancia. Pero fue padre crecer con esa obsesión por conseguirlos. De hecho con el unicel de algún empaque de algún electrodoméstico construí mi propio AT-AT. Y con una plancha vieja de plástico le pegué unos cartones a manera de alas y tuve mi Slave1.

Esta imagen del AT-AT traumó mi infancia.
Así empezó mi colección aunque de eso hablaré en otra entrada.
Ya en el 83 vimos el Regreso del Jedi y ahora si empece a pedir que me compraran de todo.
Mi papá que ya de antes estaba convencido de que Star Wars era una fregonería me contó que hubo una secuencia de esta película que si lo sacó mucho de onda por su realismo y que al final acabó siendo su favorita de toda la trilogía que fue la persecución en la Luna de Endor en las speeder bikes.
Y es que si es muy buena.
Me acuerdo que yo al ver el "Regreso" no sabía ni que onda con nada. No sabia porque Han Solo estaba congelado, ni porque Luke traía un guante negro, ni nada, pero eso si, todo mundo me hablaba del tema como la cosa mas natural del mundo, ¿pues que no te acuerdas que lo congelaron la final de la dos? Todo mundo daba por hecho que yo ya había visto el Imperio, pero la verdad es que nunca nadie tuvo la amable cortesía de llevarme.
El Imperio contraataca se convirtió entonces en un tipo de leyenda para mi. Solo tuve acceso a uno de esos libros con cassette, que traía una versión narrada con algunas escenas actuadas y efectos de sonido. Un poco como la radio novela pero adaptada para niños. Así pude enterarme de los eventos ocurridos en el Imperio Contraataca.
Fue hasta el 87 cuando mi tía (si la que me regaló las naves) me llevó a mi y a mi prima a ver el Imperio en el ahora desaparecido Cine Viveros 2000.
Fue una experiencia maravillosa poder ver por fin todos esos sucesos que tan solo eran mitos para mi.
Fue de hecho como ver una precuela en donde se revelaron frente a mi todas la explicaciones de todo aquello que ya había visto en el Regreso.
Boba Fett. Lando. El entrenamiento de Luke. Sobretodo Yoda me impactó muchísimo, otra vez no sabía explicarme como le habían hecho para darle vida al maestro Jedi. La escena primordial de Vader y su revelación.Todo por fin frente a mis ojos.
Mi primer CD de Williams.
Ahora, el Taun-taun se había convertido en el objeto de mi obsesión.
Así fue como viví los años originales de la Santa trilogía. Luego vendría la "gran sequía" donde SW pasó a ser algo así como un "oldie but goodie" y no se podía conseguir absolutamente nada relacionado a la saga con excepción de los Ewoks y los Androides en caricatura pero nada de mercancía, pues incluso Lily Ledy la empresa de juguetes que fabricaba las figuras de Star wars en México había quebrado unos años antes. Fue hasta 1991 que mi cuate Ray y yo nos topamos en un intercambió escolar en Boston con el soundtrack de la trilogía. De hecho antes de que esto pasara recuerdo que él tenía el sountrack en LP y poníamos la música para recordar escenas de la película. Hay que recordar que la primer versión en VHS de estás películas no salió sino hasta 1990, por lo cual pasó un buen rato en el que tan solo podíamos escuchar la música y recordar. Los soundtracks que nos encontramos en el gabacho, ya en CD, lo único que hicieron fue que nuestra afición que andaba un poco moribunda por culpa de la "gran sequía" cobrara nuevos bríos.
Por esos años, pasaron por canal 22 la trilogía completa y por fin la pude grabar de la tele y así ya pude verla las veces que quise.
Finalmente lo que reavivo totalmente la llama del fandom en mi fue que en 1994 salió la colección de tarjetas de Topps Star Wars Galaxy las cuales me fascinaron y de ahí pal real.
Nuevo dinamismo a viejas escenas.
Me encantó
Pero no solo eso sino que en esos años de la primera mitad de los 90 me topé con un estudiante de la carrera de Biología llamado Alonso Vilches en la antigua y desaparecida tienda de comics Comicastle de Felix Cuevas.
El viejo Comicastle.
Ese día yo andaba juntando las tarjetas antes mencionadas y él notó que yo estaba platicando con un medico de cuyo nombre no me puedo acordar, que también era fan y que también andaba comprando tarjetas. Alonso se acercó nos saludó y nos pidió nuestros números telefónicos.
A los pocos días recibí una llamada que me invitaba a formar parte de un grupo que estaba jugando el juego de rol de SW los fines de semana en la casa de un tal Mauricio Sanchéz.
Alonso me dio el número de Mauricio para que le hablara y le preguntara si me permitía participar en sus juegos dominicales.
Una vez que me puse en contacto con Mauricio y que con gran efusividad me dio la bienvenida, empezó para mi una emocionante aventura al lado de los hermanos mayores que nunca tuve y que afortunadamente continua aun hoy en día.
Después vendría el viaje del 97 que realice junto con Alonso y Mau cortesía de W FM en aquellos tiempos en que nuestro amigo Jorge Avila hacia sus pininos en la radio como crítico de cine. Asistimos al re-estreno conmemorativo del 20 aniversario de Star Wars en el teatro Chino de Los Angeles.
Claro luego vino la lamentable debacle con las precuelas.
Aun asi en el 2002 nos lanzamos nuevamente a Los Angeles para ver el fallido Episodio 2. Que importó que estuviera chafa la película si me la pasé increíble en la compañía de mis cuates Lalo y Mau, buscando la mayor cantidad de funciones posibles en proyección digital para poder verla el mayor numero de veces posibles en ese formato en tan solo un fin de semana.
Hoy en día creo que cuento con suficientes buenos recuerdos y amigos que se han vuelto entrañables como para perdonar a Lucas y su incapacidad de escribir y dirigir algo padre y de esa forma poder seguir siendo un fan de hueso colorado y muy agradecido con quienes hicieron posibles este gran universo, especialmente con John Williams y su prodigiosa música, Ralph McQuarrie y sus  asombrosos dibujos, Stuart Freeborn y su magia al crear mascaras y personajes de un realismo abrumador, con John Dykstra y sus increíbles efectos especiales, con Gary Kurtz por haber equilibrado las malas ideas de Lucas, con Irvin Kershner por habernos dado la mejor película de la trilogía y pues ni modo con Lucas por haber sido el que lo empezó todo.
Los que nacimos bajo el signo de StarWars en el lejano 1977 cumplimos en este 2012 junto con el Episodio IV 35 años.
35 años de disfrutar a lo grande sin nunca dejar de ver hacia las estrellas.


     

miércoles, 14 de noviembre de 2012

80 Aniversario de John Williams

Lenox Massachusetts es un pueblito gringo en medio de la nada a dos horas de la ciudad de Boston. Rodeado de los frondosos bosques de Nueva Inglaterra es un lugar ideal para no hacer nada mas que admirar el paisaje. De hecho no hay mucho mas que hacer.
Es un lugar que pasaría totalmente inadvertido por el mundo entero de no ser porque ahí se encuentra el centro musical Tanglewood casa de verano de la Orquesta Sinfónica de Boston.
Durante el verano para aprovechar los pocos rayos de sol que les tocan anualmente, los Bostonianos agarran sus chivas y se lanzan a Tanglewood a tener días de campo y picnics y a escuchar los conciertos que tocan ahí y que suelen ser de música popular de todos tipos con la única intención de divertirse.
Tanglewood tiene dos salas de conciertos, el Serge Koussevitzky Music Shed que es un foro al aire libre con forma de queso rebanado, diseñado para tener la mejor acústica posible y el Seiji Ozawa Hall que es una especie de granero rectangular que sirve para conciertos de cámara o agrupaciones mas pequeñas.
El lugar es una especie de hacienda vieja que ha sido acondicionada para recibir gente pero que conserva totalmente su aspecto rustico y campirano gracias a sus tremendos jardines y a su arquitectura neo-inglesa.
Bueno pues en este sitio el 18 de Agosto del 2012 tuvo lugar un concierto especial en honor del compositor neoyorkino John Williams por su cumpleaños numero 80.
John Williams después de 60 años de carrera musical ha compuesto, sin lugar a dudas, los temas de películas mas reconocibles de la historia del cine.


Empezando por el tema de Tiburón  pasando por La Guerra de las Galaxias y Superman, obteniendo su segundo oscar por E.T.(el primero fue por hacer la adaptación de la música de  Violinista en el tejado al cine) pasando por Indiana Jones, Jurassic Park, Hook, su tercer oscar con Shindler's List y sus soundtracks mas recientes como Harry Potter y Tin-Tin.
Fue una experiencia muy padre desde tener que manejar en carretera desde la ciudad de Nueva York, hospedarse en un pequeño hotel (un Econolodge) donde se hospedaron muchas de las personas que asistieron al evento, hasta llegar al muy hermoso lugar donde nuestra canasta de día de campo nos esperaba  con una rica cena (de pollo frío).Una vez que encontramos un claro entre el mar de gente que se dió cita ese día, nos instalamos y nos dimos a la tarea de disfrutar de un día de campo muy al estilo gringo y rodeados de gringos por aquí y gringos por allá, en espera del comienzo del concierto.
La comida consistió de un pollo bueno pero frío acompañado de ensalada de papa, ensalada de verduras, bisquets con mantequilla y lo mejor pay de manzana con moritas azules.
Después de degustar nuestros alimentos, recogimos nuestro tenderete y fuimos a buscar nuestros lugares para disfrutar del concierto.
Fue un evento muy elegante y realmente sobresaliente. Al maestro Williams lo mandaron felicitar via video el ex-presidente de los estados unidos Bill Clinton, el presidente Barack Obama, y su buen amigo George Lucas. Sobre el escenario apareció el director de cine Steven Spielberg quien le dedicó unas emotivas y muy interesantes palabras a su colaborador de mas de 30 años.
Spielberg contó una anécdota que no solo deja ver la maestría musical de Williams o su impacto en el mundo sino también el poder de la música como lenguaje universal.
Spielberg se encontraba en filmando el Imperio del Sol en Shangai y un oficial de policía se le acercó porque lo había reconocido y en vez de hablarle en chino para saludarlo, pues el poli sabía que no le iba a entender nada optó mejor por tararearle el tema de E.T.
Así pues después de que medio mundo le rindió pleitecías, comenzó el concierto con una banda de guerra elegantemente ataviados en sus uniformes militares y tocaron el comienzo de la fanfarria olímpica compuesta por Willliams para los juegos Olímpicos de Los Angeles 84.
El concierto fue largo y tocaron música de otros compositores y no solo de Williams, aunque la mayoría fueron piezas de el. Por supuesto que las que mas disfrute fueron los temas que ha compuesto para distintas películas. El tema de Harry Potter, el de E.T., Going to school de Memorias de una Geisha donde el violonchelista Yo-yo ma se pudo lucir. El tema de la Lista de Shindler siempre emotivo y el emocionante tema de Star Wars.
Al final del concierto las distintas secciones de la orquesta tocaron por separado el "Feliz Cumpleaños", es decir, primero fue tocado por puras cuerdas, luego puras percusiones y luego puros metales.
Fue una experiencia verdaderamente exquisita que llevó casi un año de planeación para poder estar ahí y que salió perfecta gracias a toda esa preparación previa y a una ejecución impecable. Fue así como pudimos estar presentes en esta celebración de cumpleaños de un hombre que estoy seguro ignora cuantas vidas ha tocado con su arte. 2012 ha sido un año en el que se han celebrado muchos aniversarios y el cumpleaños numero 80 de John Williams fue para mi uno muy especial, no solo por el celebrado y su obra sino por la persona con la que pude compartir toda esta aventura.


Una loa al maestro John Williams.

martes, 13 de noviembre de 2012

50 años de James Bond

El punto de vista a través del barril de un arma de fuego se centra en  un hombre alto elegantemente vestido caminando de derecha a izquierda. El hombre en un movimiento rápido y elegante se detiene, gira y dispara. Todo se cubre de sangre.

Siluetas de mujeres desnudas bailando sugerentemente.

Tema musical interpretado por alguna leyenda de la música como Paul Mcartney, Duran Duran, Tina Turner o Madonna.

Un vodka-martini  agitado no revuelto.

Elegancia.

Estilo.


The name is Bond

James Bond.


Audery Hepburn y Sean Connery
en Robin y Marian de  1979
Para mi el Bond original era y es Roger Moore por la sencilla razón de que a mi no me tocó la época de Sean Connery. Para mi Connery era Robin Hood viejo de Robin y Marian de 1976 o Juan Sanchez Villa-lobos de Highlander o de plano el papá de Indiana Jones, pero no Bond. Lo malo del asunto es que de hecho nunca vi ninguna de las peliculas de Moore al momento de su estreno pues estaba yo muy chico para que me llevaran a verlas, por lo cual, lo único que recuerdo de esa época son los posters y los juguetes,  que resultaron ser material suficiente para que me volviera fan.
El primer poster que recuerdo de Bond es el de "Solo para sus ojos" de 1981. Aunque tenia 4 años lo recuerdo muy bien y es que lo veia yo casi diario ya que entre el Super-mercado y mi casa estaba el ahora desaparecido Cine Campestre (ahora es un Bolckbuster apunto de desaparecer también) y cada vez que íbamos a hacer el super, pasábamos enfrente del cine que tenia sus cajas de luz montadas sobre los muros dando hacia la calle con los posters de la película en turno. No hay cosa mas padre que haber crecido entre dos cines, el Campestre y el gigantesco cine Pedro Armendariz (hoy en dia Cinemark CNA). Este poster de Bond era realmente memorable con las piernas de una mujer en traje de baño abiertas en posición de ataque y Bond a la distancia en medio de ellas apuntando con su pistola. A los lados de las piernas de la chica escenas de acción.

Para mi fue un poster difícil de olvidar ya que en esos años Mattel decidió comercializar en México su marca Big Jim bajo el nombre de James Bond. Lo que sucede es que Big Jim era como el Max Steele de hoy pero setentero y de hecho Mattel ya había  comercializado esta marca en México bajo el ahora famoso nombre de Kid Acero. A finales de los 70s sacaron una colección de Big Jim con equipo especial de espionaje y la gente de Mattel pensó que la mejor forma de venderla en México sería poniéndole el nombre de James Bond, ya que lo consideraban un nombre bien conocido en México ademas de que estaban sacando nuevas películas del espía británico con regularidad.

Como los comerciales de estos juguetes salían en la tele y el arte de las cajas de los juguetes era muy parecido a las ilustraciones del poster, todo se conjugo para que esas imagines quedaran grabadas en mi mente, de hecho, quedé enamorado de todo el concepto y recuerdo claramente haber ido especialmente a la juguetearía ARA (lugar que hoy ocupa la torre Murano sobre Insurgentes Sur) a comprar la figura de Bond y a uno de sus enemigos: Boris Craneo de Acero. Nunca logré que mis papas me compraran el Helicóptero que era verdaderamente orgásmico ya que era enorme, de helices movibles y que además disparaba agua.

Esos juguetes eran una maravilla. El mono de Bond que como ya he mencionado en realidad era Big Jim traía un portafolios donde venían unas mascaras que se colocaban por detrás de la cara original osea quedaba oculta por debajo del cabello y al apretar un mecanismo las caras giraban y cambiaban disfrazando automáticamente a Bond. La cara original de esta figura de acción se me hacía que estaba igualita a la de Roger Moore, por lo cual se me reforzó la idea de que el otrora interprete de El Santo (no el enmascarado de plata) era el único y verdadero James Bond.

La única bronca que tuve es que Mattel nunca sacó ninguna chica Bond por lo cual  las Barbies de mi prima tuvieron  que entrar al quite con todo y que le sacaban bastantes cabezas de estatura a James.
Luego recuerdo perfectamente el poster de Octopussy de 1983, que como tenia 5 años por supuesto que no me dejaron ir a verla, pero recuerdo bien a la elegante Maud Adams rodeando a Roger Moore con sus ocho brazos.
Ya para estas alturas del partido yo ya era fan de Bond, pero no por las películas sino por todo lo que rodea al personaje. Mis primos cinéfilos de hueso colorado y fans de la música discutían la noticia de que Sheena Easton era la nueva interprete del tema de la nueva película de Bond. Mi tía  fan de Sean Connery, defendía a este en contra de Moore diciendo que Roger era tan solo una imitación del original y que ya estaba muy viejo para interpretar el papel. Y mientras tanto, yo seguía sin poder ver ninguna película de Bond porque eran para adultos.Chale.

Fue hasta el 89 cuando por fin pude ir al cine a ver una de Bond, aunque ahora la estafeta había sido pasada a Timothy Dalton que para mi era el primer nuevo Bond.
Dalton ya había filmado en el 87 "The living daylights" que en México se llamó "Su nombre es peligro" la cual me pasó completamente de noche.
Dalton en una escena de tortura cruel.
Vean como sufre. 
Fue pues esta película del 89 "Con licencia para matar", mi primer película de Bond, y me encantó.
Primero claro está por las chicas Bond, Carey Lowell que aun hoy en día en su papel de abogada en la Ley y el Orden me parece una de las criaturas mas hermosas que jamas haya pisado la faz de la tierra; no por nada el abusado de Richard Gere la hizo budista tibetana y luego su esposa y Talisa Soto otra hermosísima mujer que acabó siendo la mujer del actor Benjamin Bratt después de hacerla de Vampirella.
Ademas me gustó mucho porque salen varios actores mexicanos debido a que la película gira alrededor del tema del narcotráfico. Digo asociación obligada. México = drogas, ya desde entonces.
Salen Claudio Brook, Pedro Armendariz Jr. cuyo padre ya había también salido en otra de Bond "From Russia with Love" del 63 interpretando al carismático Kerim Bey último papel de Armendariz antes de suicidarse.
Por ultimo Dalton que es considerado el Bond de Ian Fleming me agradó mucho haciendo una interpretación sobria y ruda del espía ingles.
En esta época recuerdo haber rentado varias de Bond en videocentro y videovisión pero curiosamente ninguna de Connery. Yo ya me había hecho mi universo Bondiano propio en donde el Bond original era Roger Moore, el Bond nuevo y moderno era Dalton y Connery era mas bien como un mito o una leyenda.
Fue hasta que Pierce Brosnan entró al quite cuando sentí por primera vez las ganas de ver a Sean en acción. Y no por que Brosnan lo hiciera mal, ni mucho menos, ya que siempre me debato ( que son los debates que vale la pena sostener con uno mismo) sobre quien es el mejor Bond, sino porque ya había mas acceso a estas películas gracias a Blockbuster y Tower Records y así empece a verlas todas.
Después de ver todas las de Connery voví a quedar convencido que mi época era la de Moore simplemente porque los actores me eran mas familiares sobre todo los de la película "El hombre del rovolver dorado" donde sale Christopher Lee (Drácula de Dráculas) de villano.
De hecho no fue el único actor que habiendo interpretado a Drácula saliera después en una de Bond ya que el actor francés Louis Jourdan también salió de villano en Octopussy justamente.
Sin embargo la era que realmente disfrute ya como se debe en la oscuridad de un cine fue la de Pierce Brosnan. Lo que creo que vino a hacer Brosnan y los escritores de sus películas es humanizar a Bond poco a poco al grado que hoy en día con Daniel Craig tenemos al Bond mas humano y mas creíble de todos.
Decidir entre cual actor ha sido el que mejor a encarnado al personaje creado por Ian Flemming es realmente imposible ya que cada uno incluso George Lazemby, pues hay quienes afirman que ha sido el mejor Bond, cosa con la que no concuerdo, o David Niven han aportado algo al personaje.
En realidad siento que cada época ha tenido lo suyo pues son tantos los elementos que hacen de la franquicia del 007 una tan rica e interesante que verdaderamente no hay por donde empezar.
Por supuesto que las chicas Bond requieren de una entrada a parte por si sola, al igual que la música, por otro lado están los gadgets, los coches, los enemigos, los diferentes Blofelds.
Este año se cumplen 50 años de Bond en la pantalla, para mi han sido ya mas de 20 años en un viaje muy padre al lado del agente británico que mas o menos cada dos años regresa con nosotros a contarnos sus aventuras, encuentros y desencuentros mientras degusta un vodka-martini agitado jamas revuelto.